Mario Vargas llosa nació en Arequipa, Perú, en 1936. Meses antes de su nacimiento sus padres se separaron, su madre, en aras de protegerlo y para evitar una posible humillación social, le dijo al niño que su padre había muerto. Con la intención de eludir apremios económicos y tener ayuda en la crianza del pequeño, regresó a vivir con sus progenitores. Por motivos laborales, el abuelo de Mario se trasladó con todo su familia a Cochabamba, Bolivia; allí vivió su infancia, la que siempre la recordó como una etapa muy feliz de su vida, donde tuvo su primer encuentro con la literatura, con el gozo de leer y el deleite de vivir innumerables aventuras a través de ella. A los doce años, ya de regreso en Perú, su madre se reencuentra con su expareja y deciden reconstruir la familia, para ello la verdad debía salir a la luz, su padre no solo no había muerto sino que también quería oficiar de tal. El novel adolescente estaba viviendo en carne propia una historia que sobrepasaba con creses las ficciones literarias que hasta el momento había leído.
Su padre era un hombre severo, estricto, de permanente gesto adusto, que reprobaba el deseo ya manifiesto de su hijo de ser escritor, y por su inapelable decisión, el joven Mario realizó la escolaridad secundaria como pupilo en la academia militar Leoncio Prado en Lima. Allí daría sus primeros pasos en el oficio que luego supo cultivar, al escribir cartas de amor que los compañeros le encargaban para enviarlas a sus novias. Lo vivido en aquellos años tuvo una importancia muy fuerte en él, que derivó años más tarde en una de sus obras más representativas, la que lo catapultó al mundo como escritor: La ciudad y los perros.
En el verano de 1952 ingresó a trabajar en el periódico La Crónica, donde se desempeñó como redactor en la sección policial; este tránsito le dio la inspiración para una de sus obras más aclamadas: Conversación en la catedral. Este trabajo le sirvió como excusa para no matricularse en el último año del secundario en el liceo militar. Por motivos de tiempo, dado que ya había comenzado el ciclo lectivo, no pudo obtener cupo en ningún colegio de Lima, razón por la cual se muda a la ciudad de Piura donde vivía su tío materno, quien le consigue la inscripción en el colegio Nacional San Miguel de Piura, en paralelo, ingresa a trabajar en el diario La industria, de dicha ciudad. Aquí escribió su primera obra teatral denominada La huida del inca, y conoció la casa de citas La casa verde, que le daría el título para su segunda novela, la cual años más tarde obtendría el Premio Internacional de Literatura Rómulo Gallegos.
En 1953, luego de terminar la secundaria, regresó a Lima, donde se inscribió en la universidad de San Marcos en las carreras de Letras y Abogacía, posteriormente abandonó esta última para darle paso a la primera. En esta etapa se inició en la participación política a través de grupos universitarios con ideas comunistas opositores a la dictadura de Odría. Dicha experiencia también le serviría como fuente para lo que luego fue Conversación en la catedral. En estos años también escribió cuentos que luego se convirtieron en Los Jefes.
En 1955, a los diecinueve años, conoce a su tía política Julia Urquidi Illanes, doce años mayor que él y hermana de la esposa de su tío Luis Llosa, con quien contrajo matrimonio pese a la férrea oposición familiar falsificando su partida de nacimiento, dado que no contaba con la mayoría de edad requerida en aquél entonces para dicho acto. Las peripecias vividas fueron narradas en su novela La tía y el escribidor del año 1977. Para sostener su hogar realizó diversos trabajos, entre ellos fue asistente de bibliotecario y redactor de noticias en Radio Panamericana. En 1957 ganó el premio de cuentos Reveu Francaise con El desafío publicado luego con Los Jefes, de este modo pudo viajar a Francia. Un año más tarde presentó su tesis universitaria sobre la obra de Rubén Darío y su proceso creativo, obteniendo la calificación más elevada posible. Posteriormente consiguió una beca de la Universidad Complutense de Madrid para realizar un doctorado en Letras. Se radica en dicha ciudad con su esposa, pero abandona sus estudios para afincarse en París. Allí fue docente de español en una escuela, periodista en la sección española de France Press y escribió Los impostores, novela por la cual ganó el premio Biblioteca Breve de la editorial Seix Barral, que en 1963 fue publicada con el título La ciudad y los perros. En 1965 se divorcia de Julia Urquidi Illanes y en compensación le cede los derechos de dicha novela. La cesión mencionada terminó en 1983, dado que su exesposa publicó el libro Lo que Varguitas no dijo, generando un conflicto legal que fue resuelto con una transacción económica a cambio del fin de la cesión.
Al año siguiente de su divorcio contrajo matrimonio con su prima hermana, Patricia Llosa; colaboró en diversas revistas latinoamericanas y publica La casa verde por la que gana el Premio de la Crítica Española. En 1967, se muda a Londres donde dio clase de literatura latinoamericana en el Queen Mary College. Durante este período conoció a Julio Cortázar y a Gabriel García Márquez. Con este último tuvo una estrecha amistad hasta el año 1976, que por motivos que jamás fuero develados por el escritor peruano, le propició un feroz golpe de puño en el rostro al colombiano en un incidente tan confuso como terminante. El vínculo entre estos dos escritores fue verdaderamente profundo y estrecho, tal fue así, que el segundo hijo de Vargas Llosa se llama Gabriel en honor a quien fue su amigo y padrino del niño; a su vez escribió su tesis doctoral en 1971 titulada Historia de un deicidio sobre la obra de aquél. Su admiración también lo llevó a brindar seminarios en universidades inglesas y estadounidenses sobre su obra.
En 1969 publicó su tercera novela, Conversación en la catedral. El periódico El mundo la posicionó dentro de su lista de las cien mejores novelas del siglo XX, asimismo, destacados críticos independientes de diversas latitudes se manifestaron en igual sentido.
Iniciado el año 1970, su agente literaria, la catalana Carmen Balcells, lo convence para que deje la docencia en Inglaterra, se mude a Barcelona y se dedique exclusivamente a escribir. Así fue que en 1973 publicó su cuarta novela, Pantaleón y las visitadoras, por la que ganó el Premio Latinoamericano de Literatura.
En 1975 publicó su segundo ensayo titulado La orgía perpetua. Flaubert y Madame Bovary y fue elegido como miembro de la Academia Peruana de la Lengua. Para 1978 inicia su trabajo sobre la novela La guerra del fin del Mundo que vería la luz en 1981, año en el que también se estrenó la obra teatral La señorita de Tacna con gran éxito y conduciría el programa televisivo cultural La torre de babel. En 1983, por encargo del presidente de Perú de aquél momento, Fernando Belaunde, presidió la comisión de investigación de caso Uchuraccay, donde fueron asesinados ocho periodistas. En 1984 publicó su séptima novela La historia de Mayta. En 1985, el gobierno francés lo codecoró con la Legión de Honor. En 1987, lideró un movimiento de oposición al gobierno de Alan García que desembocó en la fundación del Movimiento Libertad sustentado en ideas liberales, que, agrupado con otros partidos políticos formarían el denominado Frente Democrático que lo llevó como candidato a presidente en las elecciones de 1990, las que perdió en segunda vuelta frente a Alberto Fujimori.
En 1993, radicado en España y con la ciudadanía de dicho país, que le fue concedida tras su pedido por la amenaza pública del régimen de Fujimori de declararlo traidor a la patria y retirarle la originaria, publicó su novela autobiográfica El pez en el agua, la obra teatral El loco de los balcones y ganaría el Premio Planeta con su novela Lituma en los andes. En 1994 publicó un compendio de artículos periodísticos titulado Desafíos a la libertad. Al año siguiente es nombrado miembro de la Real Academia Española. En 1997 vieron la luz su novela Los cuadernos de Rigoberto y su ensayo Cartas a un joven novelista; en el año 2000 La fiesta del chivo. Le siguieron El paraíso en la otra esquina (2003), Travesuras de una niña mala (2006) y en 2010 El sueño del celta, año en el que fue acreedor del Premio Nobel de Literatura.
Un año más tarde, el rey Juan Carlos I de España lo nombró primer marqués de Vargas Llosa. En 2012 publicó el ensayo La civilización del espectáculo con importantes repercusiones por sus señalamientos críticos allí vertidos referidos a la “banalización” como forma de vida en la posmodernidad.
En 2015 puso fin a su matrimonio con Patricia Llosa y comenzó una relación con Isabel Preysler que duraría siete años. Posteriormente retomó el vínculo con su anterior esposa, el cual sostuvo hasta el final de su vida.
En 2018 publicó La llamada de la tribu. En 2021 fue designado miembro de la Academia Francesa, siendo el primer escritor en integrarla que no había escrito obras en francés. En 2023 publicó su última novela Le dedico mi silencio y su última columna en el diario El País de España.
Este multipremiado escritor, políglota, de vasta erudición, dedicado y metódico en su forma de trabajo, influenciado principalmente por Alejandro Dumas, Víctor Hugo, Gustav Flaubert y William Faulkner, vio sustrato fértil en la condición humana, ello lo llevó a escribir novelas, cuentos y obras teatrales de un profundo realismo, ensayos agudos y artículos sagaces. Falleció el 13 de abril de 2025 en Lima, Perú, a los 89 años tras una vida larga y fructífera, que dejó una obra innovadora en la técnica, la composición y la estructura, caracterizada por una inmensa calidad que interpela y sensibiliza al lector.-

Autor:
Agustín Miranda

